Agencias.- Chile decidió rechazar la propuesta para realizar una nueva Constitución. Con el 95% de las mesas escrutadas del plebiscito, el «rechazo» obtuvo casi un 62% de votos por el 38% del «apruebo».
Más de 15 millones de electores estaban convocados a votar este domingo 4 de septiembre en Chile, para aprobar o rechazar una nueva Constitución que busca cambiar un modelo heredado de la dictadura de Augusto Pinochet por otro que instaure mayores derechos sociales.
Según los datos oficiales, la opción del rechazo se impuso en las 16 regiones del país, mientras que la del ‘apruebo’ ha ganado únicamente en el extranjero.
La coalición de gobierno que lidera el presidente Gabriel Boric había propuesto cambios incluso si la Constitución se aprobaba, en un intento de mitigar los miedos de los partidarios del «rechazo» ante ciertas propuestas del texto que veían como «radicales».
Los elementos que más divisiones provocaron del proyecto fue haber consagrado la plurinacionalidad indígena y haber incluido en su nuevo catálogo de derechos sociales el aborto y el derecho a la vivienda “digna” con un énfasis medioambiental.
La nueva constitución fue realizada de forma paritaria por mujeres y hombres, en un texto que consta de 178 páginas, 388 artículos y 54 normas transitorias que fue ampliamente rechazado.
Decenas de personas comenzaron a festejar luego de conocer las tendencias, en especial en los barrios acomodados de la capital, donde el rechazo ganó por más de 10 puntos de diferencia.
La expresidenta Michelle Bachelet, muy popular en este país, dijo que de ganar la opción Rechazo como anticipan los sondeos, «las demandas de los chilenos no van a quedar satisfechas» y se debería convocar a un nuevo proceso.